"Le dije: Señor, Dios del cielo, grande y temible, que cumples el pacto y eres fiel con los que te aman y obedecen tus mandamientos, te suplico que me prestes atención, que fijes tus ojos en este siervo tuyo que día y noche ora en favor de tu pueblo Israel (LA FAMILIA).
Nehemías 1: 5-6a.
Los grandes padres de familia saben por instinto que tienen que equilibra el uso de su tiempo. Necesitan pasar tiempo con la familia para guiarla, y necesitan pasar momentos a solas con Dios. El tiempo de meditación es crítico para la eficacia del padre. Nehemías era un hombre de oración. Aprende de su ejemplo. Tu vida privada de oración determina la eficacia de tu paternidad en la casa.
Nehemías era hombre de oración y meditación. Oraba por todo; por cada decisión que tenía que tomar, por cada crisis que tenía que enfrentar, por cada crítica que recibía. La Paternidad sin amor se vuelve simplemente una manipulación.
Oraba de día y de noche. Cuando hizo su cabalgata de media noche por Jerusalén, se pasó tres días en su habitación, saliendo solo de noche para inspeccionar los muros. ¿Qué estaba haciendo durante todo aquel tiempo? Estaba meditando, orando, inspeccionando y hablando con Dios. Revisaba una y otra vez en la mente los sucesos, sus planes y las soluciones que Dios le daba.
Los padres eficaces saben que su tiempo público debe estar equilibrado con su tiempo a solas con Dios.
"Cuando oí sus palabras de protesta, me enojé muchísimo. Y después de reflexionar, reprendí a los nobles y gobernantes". Nehemías 5: 6-7
Nehemías sabía poner a funcionar bien el cerebro antes de poner su lengua en movimiento. Era un hombre de meditacion. Esperaba a que Dios le diera la perspectiva correcta: "Dios mío, ¿qué quieres que diga?"
¿Alguna vez ha hablado sin pensar? Como padre, vamos a aprender, tal como lo hemos tenido que aprender muchos padres en la actualidad, que es importante pensar antes de hablar. Los grandes líderes meditan. Nehemías dice: "Medité sobro lo que iba a decir"
Antes de exponer mi enseñanza de fin de semana, dedico gran tiempo de mi semana meditando y corrigiendo mis pensamientos acerca de la misma. Leo, analizo, oro, repaso una y otra vez lo que escribo y lo que concluyo para transmitirle a la iglesia. La meditación precede a la acción. Una vez hecha la meditación, la presentación resulta automática. La meditación la cultiva en nuestra mente. Nehemías era un hombre compasivo, mesurado y con mucha autoridad por causa de su meditación. Se preocupaba por su gente. ¿Cómo estás tú con tu familia, en cuanto a lo que les enseñas en tu altar familiar? ¿Tienes un altar familiar con tu esposa e hijos, o con tus padres y hermanos? Medita mucho en esto...
"Vamos de Gloria en Gloria y De Victoria en Victoria ..."
P. Jorge A. Arango R. ,Centro de Transformación Integral, Medellín Colombia.
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