LA TRANSFORMACION EN LA VIDA DEL HOMBRE
1) Cuando se deja de cambiar, se deja de vivir.
2) Las cosas buenas de la vida vienen a través de cambios:
· La carrera
· El matrimonio
· La paternidad
· El nuevo nacimiento
· El proceso santificador
3) Sin transformacion no hay maduración ni progreso.
· Después de todo, el progreso es un cambio.
LAS RESOLUCIONES DE AÑO NUEVO
1) La llegada de un año siempre es interpretado como un nuevo punto de partida y una oportunidad para corregir errores cometidos, efectuar cambios importantes y tomar decisiones pospuestas o relegadas.
2) Las 12:00 a.m. de la noche del 31 de diciembre es para muchos como presionar el botón de borrar el millaje, para comenzar nuevamente en cero.
3) Casi toda persona se establece a sí misma una serie de metas o “resoluciones” para el año que comienza.
4) ¿Cuántos tienen resoluciones para el 2009?
LA PREGUNTA ES ... ¿Quiénes tienen resoluciones relacionadas con:
1. ¿Su vida profesional?
2. ¿Sus finanzas?
3. ¿Su familia o matrimonio?
4. ¿Su vida espiritual o ministerial?
5. ¿Su salud física?
6. ¿Sus vacaciones?
7. ¿Adquisición de bienes (casa propia o mejor casa, carro, bote, casa de playa, etc.)?
LAS METAS Y DESEOS DE LAS PERSONAS
1) Las metas de los hombres son muy a menudo medios y no fines.
2) Muchas veces no se percibe el fin real, y se persigue el medio como un fin.
3) Ejemplo: ¿Cuál fin persigue el que decide…
a) ¿Dedicar más esfuerzo a su negocio? (¿Será ganar más dinero?)
b) ¿Hacer una maestría? (¿Será estar mejor preparado profesionalmente?)
c) ¿Bajar de peso? (¿Será verse mejor o mejorar la salud?)
d) ¿Dejar de fumar? (¿Será reducir la posibilidad de cáncer?)
e) ¿Comprar casa propia? (¿Será no tener que pagar para otro?)
4) La respuesta a todas estas preguntas es similar a la pregunta de “cuál es el fin de X empresa”.
· El fin de la compañía Coca Cola es el mismo de Avianca, Macy’s, Pizza Hut, el Ashford Memorial Hospital y la Universidad EAFIT: Hacer dinero.
· Del mismo modo, todas estas metas no son fines sin medios para lograr un deseo común a todos los hombres: la felicidad y la autorrealización.
5) Tener claro lo anterior es vital porque:
a) Cuando se confunde el fin con el medio, podemos equivocarnos al elegir el medio.
b) El fin real puede ser más fácil de lograr que el medio elegido.
· Podría ocurrir que se alcance el fin antes que el medio, y aún preservar un sentido de insatisfacción y frustración.
II. UN AÑO QUE VIENE Y OTRO QUE SE VA
A) EL CASO DE SALOMÓN
1) Su comienzo:
2 Cr.1: 7Y aquella noche apareció Dios a Salomón y le dijo: Pídeme lo que quieras que yo te dé. 8Y Salomón dijo a Dios: Tú has tenido con David mi padre gran misericordia, y a mí me has puesto por rey en lugar suyo. 9Confírmese pues, ahora, oh Jehová Dios, tu palabra dada a David mi padre; porque tú me has puesto por rey sobre un pueblo numeroso como el polvo de la tierra. 10Dame ahora sabiduría y ciencia, para presentarme delante de este pueblo; porque ¿quién podrá gobernar a este tu pueblo tan grande? 11Y dijo Dios a Salomón: Por cuanto hubo esto en tu corazón, y no pediste riquezas, bienes o gloria, ni la vida de los que te quieren mal, ni pediste muchos días, sino que has pedido para ti sabiduría y ciencia para gobernar a mi pueblo, sobre el cual te he puesto por rey, 12sabiduría y ciencia te son dadas; y también te daré riquezas, bienes y gloria, como nunca tuvieron los reyes que han sido antes de ti, ni tendrán los que vengan después de ti.
1 Re.10: 23Así excedía el rey Salomón a todos los reyes de la tierra en riquezas y en sabiduría. 24Toda la tierra procuraba ver la cara de Salomón, para oír la sabiduría que Dios había puesto en su corazón.
B) Datos que la Biblia nos revela sobre Salomón:
1. Fue el rey más sabio de la historia de Israel.
2. Fue el rey más rico de la historia de Israel.
3. Edificó templo a Jehová.
4. Disfrutó al máximo sus riquezas, concediéndose una gran cantidad de lujos extravagantes, y todas las comodidades y placeres no pecaminosos que su dinero le permitía.
5. Se dedicó a indagar las profundidades de la sabiduría, en todo lo relacionado con la vida del hombre.
2) Cerca de su final:
1 Re.11: 1Pero el rey Salomón amó, además de la hija de Faraón, a muchas mujeres extranjeras; a las de Moab, a las de Amón, a las de Edom, a las de Sidón y a las heteas; 2gentes de las cuales Jehová había dicho a los hijos de Israel: No os llegaréis a ellas, ni ellas se llegarán a vosotros; porque ciertamente harán inclinar vuestros corazones tras sus dioses. A éstas, pues, se juntó Salomón con amor. 3Y tuvo setecientas mujeres reinas y trescientas concubinas; y sus mujeres desviaron su corazón. 4Y cuando Salomón era ya viejo, sus mujeres inclinaron su corazón tras dioses ajenos, y su corazón no era perfecto con Jehová su Dios, como el corazón de su padre David. 5Porque Salomón siguió a Astoret, diosa de los sidonios, y a Milcom, ídolo abominable de los amonitas. 6E hizo Salomón lo malo ante los ojos de Jehová, y no siguió cumplidamente a Jehová como David su padre.
· Esta etapa de la vida de Salomón nos deja una moraleja: El que se acerca al fuego, tarde o temprano se quemará.
· En lenguaje paulino: “El que siembra para la carne, de la carne segará corrupción” (Gá.6: 8).
3) Su final:
Ecl.1: 1Palabras del Predicador, hijo de David, rey en Jerusalén. 2Vanidad de vanidades, dijo el Predicador; vanidad de vanidades, todo es vanidad. 3¿Qué provecho tiene el hombre de todo su trabajo con que se afana debajo del sol?
a) El gran sabio, al final de sus días, llega a una conclusión aterradora para la mente de cualquier persona: que todo es vanidad.
· Esto significa que toda actividad del ser humano es vana, es decir, incapaz de producir lo que el corazón del hombre realmente busca.
b) El v.3 muestra que todo aquello a lo que el hombre natural le dedica tiempo, esfuerzo y afán, no tiene provecho real alguno.
· En otras palabras, que han confundido el fin con el medio, y por consiguiente, sus obras no producirán el resultado deseado.
c) La parábola de Jesús:
Lc.12: 16También les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho. 17Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos? 18Y dijo: Esto haré: derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y mis bienes; 19y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate. 20Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será? 21Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios.
B) LAS CONCLUSIONES DE SALOMÓN
1) No hay nada nuevo:
Ecl.1: 1Palabras del Predicador, hijo de David, rey en Jerusalén. 2Vanidad de vanidades, dijo el Predicador; vanidad de vanidades, todo es vanidad. 3¿Qué provecho tiene el hombre de todo su trabajo con que se afana debajo del sol? 4Generación va, y generación viene; mas la tierra siempre permanece. 5Sale el sol, y se pone el sol, y se apresura a volver al lugar de donde se levanta. 6El viento tira hacia el sur, y rodea al norte; va girando de continuo, y a sus giros vuelve el viento de nuevo. 7Los ríos todos van al mar, y el mar no se llena; al lugar de donde los ríos vinieron, allí vuelven para correr de nuevo. 8Todas las cosas son fatigosas más de lo que el hombre puede expresar; nunca se sacia el ojo de ver, ni el oído de oír. 9¿Qué es lo que fue? Lo mismo que será. ¿Qué es lo que ha sido hecho? Lo mismo que se hará; y nada hay nuevo debajo del sol. 10¿Hay algo de que se puede decir: He aquí esto es nuevo? Ya fue en los siglos que nos han precedido. 11No hay memoria de lo que precedió, ni tampoco de lo que sucederá habrá memoria en los que serán después.
· Lo que una persona siente, ya ha sido sentido por millones antes.
· Lo que el hombre desea, ya ha sido deseado.
· Lo que concluye, son conclusiones ajenas.
· Las frustraciones del hombre son las mismas de todos los hombres a través de todos los tiempos.
· Muy posiblemente, las resoluciones para este año que comienza son las mismas que para cuando comenzó el presente, o el pasado.
· Título de la enseñanza: UN AÑO QUE VIENE Y OTRO QUE SE VA
2) Las obras de los hombres son vanidad y aflicción:
12Yo el Predicador fui rey sobre Israel en Jerusalén. 13Y di mi corazón a inquirir y a buscar con sabiduría sobre todo lo que se hace debajo del cielo; este penoso trabajo dio Dios a los hijos de los hombres, para que se ocupen en él. 14Miré todas las obras que se hacen debajo del sol; y he aquí, todo ello es vanidad y aflicción de espíritu. 15Lo torcido no se puede enderezar, y lo incompleto no puede contarse.
· La vanidad es la calidad de las obras y la aflicción es el resultado de éstas.
· El v.15 es una revelación referente al corazón del hombre: torcido e incompleto.
3) La felicidad (el fin) no está en cultivar el pensamiento:
16Hablé yo en mi corazón, diciendo: He aquí yo me he engrandecido, y he crecido en sabiduría sobre todos los que fueron antes de mí en Jerusalén; y mi corazón ha percibido mucha sabiduría y ciencia. 17Y dediqué mi corazón a conocer la sabiduría, y también a entender las locuras y los desvaríos; conocí que aun esto era aflicción de espíritu. 18Porque en la mucha sabiduría hay mucha molestia; y quien añade ciencia, añade dolor.
a) Demasiado a menudo, en la búsqueda del alivio, el hombre halla el dolor.
b) La sabiduría y el conocimiento (ciencia) a menudo añaden dolor.
· Por ejemplo: Se dice que los peores pacientes son los médicos mismos, porque ellos saben y entienden los procesos a los que son sometidos, los diagnósticos que les hacen, y los peligros que enfrentan.
4) La felicidad (el fin) no está en el dinero o los placeres:
2: 1Dije yo en mi corazón: Ven ahora, te probaré con alegría, y gozarás de bienes. Mas he aquí esto también era vanidad. 2A la risa dije: Enloqueces; y al placer: ¿De qué sirve esto? 3Propuse en mi corazón agasajar mi carne con vino, y que anduviese mi corazón en sabiduría, con retención de la necedad, hasta ver cuál fuese el bien de los hijos de los hombres, en el cual se ocuparan debajo del cielo todos los días de su vida. 4Engrandecí mis obras, edifiqué para mí casas, planté para mí viñas; 5me hice huertos y jardines, y planté en ellos árboles de todo fruto. 6Me hice estanques de aguas, para regar de ellos el bosque donde crecían los árboles. 7Compré siervos y siervas, y tuve siervos nacidos en casa; también tuve posesión grande de vacas y de ovejas, más que todos los que fueron antes de mí en Jerusalén. 8Me amontoné también plata y oro, y tesoros preciados de reyes y de provincias; me hice de cantores y cantoras, de los deleites de los hijos de los hombres, y de toda clase de instrumentos de música. 9Y fui engrandecido y aumentado más que todos los que fueron antes de mí en Jerusalén; a más de esto, conservé conmigo mi sabiduría. 10No negué a mis ojos ninguna cosa que desearan, ni aparté mi corazón de placer alguno, porque mi corazón gozó de todo mi trabajo; y esta fue mi parte de toda mi faena. 11Miré yo luego todas las obras que habían hecho mis manos, y el trabajo que tomé para hacerlas; y he aquí, todo era vanidad y aflicción de espíritu, y sin provecho debajo del sol.
a) NOTA: Salomón trató de retener su sabiduría y su cordura en medio de su vida de abundancia, sabiendo que la abundancia corrompe al hombre:
Pr.30: 8Vanidad y palabra mentirosa aparta de mí; No me des pobreza ni riquezas; Mantenme del pan necesario; 9No sea que me sacie, y te niegue, y diga: ¿Quién es Jehová? O que siendo pobre, hurte, Y blasfeme el nombre de mi Dios.
b) El pobre se nutre de la esperanza de “hacerse rico y ser feliz”, pero el rico vive la frustración de ya ser rico y no haber hallado la felicidad.
5) La felicidad (el fin) no está en dejar una obra o un nombre para la posteridad:
12Después volví yo a mirar para ver la sabiduría y los desvaríos y la necedad; porque ¿qué podrá hacer el hombre que venga después del rey? Nada, sino lo que ya ha sido hecho. 13Y he visto que la sabiduría sobrepasa a la necedad, como la luz a las tinieblas.
a) La expresión “después volví yo a mirar…” muestra que, aunque Salomón ya había llegado a la conclusión que en la sabiduría humana no estaba la respuesta, su decepción por su fracaso existencial a pesar de sus riquezas, obras y logros, lo llevó otra vez a considerar los méritos de ésta.
· Después de todo, la sabiduría brilla ante la necedad (v.13), y es precisamente “brillar” lo que desea el corazón del hombre.
b) Salomón pensó por un momento que su sabiduría le permitiría dejar un legado eterno, de modo que el siguiente rey no podría superar su obra.
c) Finalmente, su conclusión es otra vez frustrante:
14El sabio tiene sus ojos en su cabeza, mas el necio anda en tinieblas; pero también entendí yo que un mismo suceso acontecerá al uno como al otro. 15Entonces dije yo en mi corazón: Como sucederá al necio, me sucederá también a mí. ¿Para qué, pues, he trabajado hasta ahora por hacerme más sabio? Y dije en mi corazón, que también esto era vanidad. 16Porque ni del sabio ni del necio habrá memoria para siempre; pues en los días venideros ya todo será olvidado, y también morirá el sabio como el necio.
· La sabiduría no librará al sabio de la muerte ni del olvido.
6) El fin inevitable:
17Aborrecí, por tanto, la vida, porque la obra que se hace debajo del sol me era fastidiosa; por cuanto todo es vanidad y aflicción de espíritu. 18Asimismo aborrecí todo mi trabajo que había hecho debajo del sol, el cual tendré que dejar a otro que vendrá después de mí. 19Y ¿quién sabe si será sabio o necio el que se enseñoreará de todo mi trabajo en que yo me afané y en que ocupé debajo del sol mi sabiduría? Esto también es vanidad. 20Volvió, por tanto, a desesperanzarse mi corazón acerca de todo el trabajo en que me afané, y en que había ocupado debajo del sol mi sabiduría. 21¡Que el hombre trabaje con sabiduría, y con ciencia y con rectitud, y que haya de dar su hacienda a hombre que nunca trabajó en ello! También es esto vanidad y mal grande. 22Porque ¿qué tiene el hombre de todo su trabajo, y de la fatiga de su corazón, con que se afana debajo del sol? 23Porque todos sus días no son sino dolores, y sus trabajos molestias; aun de noche su corazón no reposa. Esto también es vanidad.
· Esto explica la alta incidencia de suicidio entre los ricos, y los billones de dólares al año que gastan en siquiatras y medicamentos para la depresión, la ansiedad y el insomnio.
7) La sabia conclusión:
24No hay cosa mejor para el hombre sino que coma y beba, y que su alma se alegre en su trabajo. También he visto que esto es de la mano de Dios. 25Porque ¿quién comerá, y quién se cuidará, mejor que yo? 26Porque al hombre que le agrada, Dios le da sabiduría, ciencia y gozo; mas al pecador da el trabajo de recoger y amontonar, para darlo al que agrada a Dios. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.
a) Esta conclusión alentadora aparece en el primer pasaje dentro del contexto donde aparece el nombre de Dios, como parte de las reflexiones de Salomón.
b) Dos verdades claves reveladas:
1. Disfrutar de los bienes que Dios nos concede es también un don divino, y parte de su perfecta voluntad.
2. La “obra” de mayor rendimiento para el hombre es agradar a Dios.
· El hombre que agrada a Dios recibe sabiduría, conocimiento y gozo (satisfacción personal).
· El pecador está sujeto a vanidad y aflicción de espíritu, y sin saberlo trabaja para el justo.
8) El mismo principio en palabras de Jesús:
Mt.6: 25Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? 26Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? 27Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo? 28Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; 29pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos. 30Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe? 31No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos? 32Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. 33Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. 34Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.
· No se trata de abandonar responsabilidades importantes, sino de no abandonar las necesarias.
C) UNA REFLEXIÓN SALOMÓNICA FINAL
Ec.4: 6Más vale un puño lleno con descanso, que ambos puños llenos con trabajo y aflicción de espíritu.
1) Cuando se deja de cambiar, se deja de vivir.
2) Las cosas buenas de la vida vienen a través de cambios:
· La carrera
· El matrimonio
· La paternidad
· El nuevo nacimiento
· El proceso santificador
3) Sin transformacion no hay maduración ni progreso.
· Después de todo, el progreso es un cambio.
LAS RESOLUCIONES DE AÑO NUEVO
1) La llegada de un año siempre es interpretado como un nuevo punto de partida y una oportunidad para corregir errores cometidos, efectuar cambios importantes y tomar decisiones pospuestas o relegadas.
2) Las 12:00 a.m. de la noche del 31 de diciembre es para muchos como presionar el botón de borrar el millaje, para comenzar nuevamente en cero.
3) Casi toda persona se establece a sí misma una serie de metas o “resoluciones” para el año que comienza.
4) ¿Cuántos tienen resoluciones para el 2009?
LA PREGUNTA ES ... ¿Quiénes tienen resoluciones relacionadas con:
1. ¿Su vida profesional?
2. ¿Sus finanzas?
3. ¿Su familia o matrimonio?
4. ¿Su vida espiritual o ministerial?
5. ¿Su salud física?
6. ¿Sus vacaciones?
7. ¿Adquisición de bienes (casa propia o mejor casa, carro, bote, casa de playa, etc.)?
LAS METAS Y DESEOS DE LAS PERSONAS
1) Las metas de los hombres son muy a menudo medios y no fines.
2) Muchas veces no se percibe el fin real, y se persigue el medio como un fin.
3) Ejemplo: ¿Cuál fin persigue el que decide…
a) ¿Dedicar más esfuerzo a su negocio? (¿Será ganar más dinero?)
b) ¿Hacer una maestría? (¿Será estar mejor preparado profesionalmente?)
c) ¿Bajar de peso? (¿Será verse mejor o mejorar la salud?)
d) ¿Dejar de fumar? (¿Será reducir la posibilidad de cáncer?)
e) ¿Comprar casa propia? (¿Será no tener que pagar para otro?)
4) La respuesta a todas estas preguntas es similar a la pregunta de “cuál es el fin de X empresa”.
· El fin de la compañía Coca Cola es el mismo de Avianca, Macy’s, Pizza Hut, el Ashford Memorial Hospital y la Universidad EAFIT: Hacer dinero.
· Del mismo modo, todas estas metas no son fines sin medios para lograr un deseo común a todos los hombres: la felicidad y la autorrealización.
5) Tener claro lo anterior es vital porque:
a) Cuando se confunde el fin con el medio, podemos equivocarnos al elegir el medio.
b) El fin real puede ser más fácil de lograr que el medio elegido.
· Podría ocurrir que se alcance el fin antes que el medio, y aún preservar un sentido de insatisfacción y frustración.
II. UN AÑO QUE VIENE Y OTRO QUE SE VA
A) EL CASO DE SALOMÓN
1) Su comienzo:
2 Cr.1: 7Y aquella noche apareció Dios a Salomón y le dijo: Pídeme lo que quieras que yo te dé. 8Y Salomón dijo a Dios: Tú has tenido con David mi padre gran misericordia, y a mí me has puesto por rey en lugar suyo. 9Confírmese pues, ahora, oh Jehová Dios, tu palabra dada a David mi padre; porque tú me has puesto por rey sobre un pueblo numeroso como el polvo de la tierra. 10Dame ahora sabiduría y ciencia, para presentarme delante de este pueblo; porque ¿quién podrá gobernar a este tu pueblo tan grande? 11Y dijo Dios a Salomón: Por cuanto hubo esto en tu corazón, y no pediste riquezas, bienes o gloria, ni la vida de los que te quieren mal, ni pediste muchos días, sino que has pedido para ti sabiduría y ciencia para gobernar a mi pueblo, sobre el cual te he puesto por rey, 12sabiduría y ciencia te son dadas; y también te daré riquezas, bienes y gloria, como nunca tuvieron los reyes que han sido antes de ti, ni tendrán los que vengan después de ti.
1 Re.10: 23Así excedía el rey Salomón a todos los reyes de la tierra en riquezas y en sabiduría. 24Toda la tierra procuraba ver la cara de Salomón, para oír la sabiduría que Dios había puesto en su corazón.
B) Datos que la Biblia nos revela sobre Salomón:
1. Fue el rey más sabio de la historia de Israel.
2. Fue el rey más rico de la historia de Israel.
3. Edificó templo a Jehová.
4. Disfrutó al máximo sus riquezas, concediéndose una gran cantidad de lujos extravagantes, y todas las comodidades y placeres no pecaminosos que su dinero le permitía.
5. Se dedicó a indagar las profundidades de la sabiduría, en todo lo relacionado con la vida del hombre.
2) Cerca de su final:
1 Re.11: 1Pero el rey Salomón amó, además de la hija de Faraón, a muchas mujeres extranjeras; a las de Moab, a las de Amón, a las de Edom, a las de Sidón y a las heteas; 2gentes de las cuales Jehová había dicho a los hijos de Israel: No os llegaréis a ellas, ni ellas se llegarán a vosotros; porque ciertamente harán inclinar vuestros corazones tras sus dioses. A éstas, pues, se juntó Salomón con amor. 3Y tuvo setecientas mujeres reinas y trescientas concubinas; y sus mujeres desviaron su corazón. 4Y cuando Salomón era ya viejo, sus mujeres inclinaron su corazón tras dioses ajenos, y su corazón no era perfecto con Jehová su Dios, como el corazón de su padre David. 5Porque Salomón siguió a Astoret, diosa de los sidonios, y a Milcom, ídolo abominable de los amonitas. 6E hizo Salomón lo malo ante los ojos de Jehová, y no siguió cumplidamente a Jehová como David su padre.
· Esta etapa de la vida de Salomón nos deja una moraleja: El que se acerca al fuego, tarde o temprano se quemará.
· En lenguaje paulino: “El que siembra para la carne, de la carne segará corrupción” (Gá.6: 8).
3) Su final:
Ecl.1: 1Palabras del Predicador, hijo de David, rey en Jerusalén. 2Vanidad de vanidades, dijo el Predicador; vanidad de vanidades, todo es vanidad. 3¿Qué provecho tiene el hombre de todo su trabajo con que se afana debajo del sol?
a) El gran sabio, al final de sus días, llega a una conclusión aterradora para la mente de cualquier persona: que todo es vanidad.
· Esto significa que toda actividad del ser humano es vana, es decir, incapaz de producir lo que el corazón del hombre realmente busca.
b) El v.3 muestra que todo aquello a lo que el hombre natural le dedica tiempo, esfuerzo y afán, no tiene provecho real alguno.
· En otras palabras, que han confundido el fin con el medio, y por consiguiente, sus obras no producirán el resultado deseado.
c) La parábola de Jesús:
Lc.12: 16También les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho. 17Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos? 18Y dijo: Esto haré: derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y mis bienes; 19y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate. 20Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será? 21Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios.
B) LAS CONCLUSIONES DE SALOMÓN
1) No hay nada nuevo:
Ecl.1: 1Palabras del Predicador, hijo de David, rey en Jerusalén. 2Vanidad de vanidades, dijo el Predicador; vanidad de vanidades, todo es vanidad. 3¿Qué provecho tiene el hombre de todo su trabajo con que se afana debajo del sol? 4Generación va, y generación viene; mas la tierra siempre permanece. 5Sale el sol, y se pone el sol, y se apresura a volver al lugar de donde se levanta. 6El viento tira hacia el sur, y rodea al norte; va girando de continuo, y a sus giros vuelve el viento de nuevo. 7Los ríos todos van al mar, y el mar no se llena; al lugar de donde los ríos vinieron, allí vuelven para correr de nuevo. 8Todas las cosas son fatigosas más de lo que el hombre puede expresar; nunca se sacia el ojo de ver, ni el oído de oír. 9¿Qué es lo que fue? Lo mismo que será. ¿Qué es lo que ha sido hecho? Lo mismo que se hará; y nada hay nuevo debajo del sol. 10¿Hay algo de que se puede decir: He aquí esto es nuevo? Ya fue en los siglos que nos han precedido. 11No hay memoria de lo que precedió, ni tampoco de lo que sucederá habrá memoria en los que serán después.
· Lo que una persona siente, ya ha sido sentido por millones antes.
· Lo que el hombre desea, ya ha sido deseado.
· Lo que concluye, son conclusiones ajenas.
· Las frustraciones del hombre son las mismas de todos los hombres a través de todos los tiempos.
· Muy posiblemente, las resoluciones para este año que comienza son las mismas que para cuando comenzó el presente, o el pasado.
· Título de la enseñanza: UN AÑO QUE VIENE Y OTRO QUE SE VA
2) Las obras de los hombres son vanidad y aflicción:
12Yo el Predicador fui rey sobre Israel en Jerusalén. 13Y di mi corazón a inquirir y a buscar con sabiduría sobre todo lo que se hace debajo del cielo; este penoso trabajo dio Dios a los hijos de los hombres, para que se ocupen en él. 14Miré todas las obras que se hacen debajo del sol; y he aquí, todo ello es vanidad y aflicción de espíritu. 15Lo torcido no se puede enderezar, y lo incompleto no puede contarse.
· La vanidad es la calidad de las obras y la aflicción es el resultado de éstas.
· El v.15 es una revelación referente al corazón del hombre: torcido e incompleto.
3) La felicidad (el fin) no está en cultivar el pensamiento:
16Hablé yo en mi corazón, diciendo: He aquí yo me he engrandecido, y he crecido en sabiduría sobre todos los que fueron antes de mí en Jerusalén; y mi corazón ha percibido mucha sabiduría y ciencia. 17Y dediqué mi corazón a conocer la sabiduría, y también a entender las locuras y los desvaríos; conocí que aun esto era aflicción de espíritu. 18Porque en la mucha sabiduría hay mucha molestia; y quien añade ciencia, añade dolor.
a) Demasiado a menudo, en la búsqueda del alivio, el hombre halla el dolor.
b) La sabiduría y el conocimiento (ciencia) a menudo añaden dolor.
· Por ejemplo: Se dice que los peores pacientes son los médicos mismos, porque ellos saben y entienden los procesos a los que son sometidos, los diagnósticos que les hacen, y los peligros que enfrentan.
4) La felicidad (el fin) no está en el dinero o los placeres:
2: 1Dije yo en mi corazón: Ven ahora, te probaré con alegría, y gozarás de bienes. Mas he aquí esto también era vanidad. 2A la risa dije: Enloqueces; y al placer: ¿De qué sirve esto? 3Propuse en mi corazón agasajar mi carne con vino, y que anduviese mi corazón en sabiduría, con retención de la necedad, hasta ver cuál fuese el bien de los hijos de los hombres, en el cual se ocuparan debajo del cielo todos los días de su vida. 4Engrandecí mis obras, edifiqué para mí casas, planté para mí viñas; 5me hice huertos y jardines, y planté en ellos árboles de todo fruto. 6Me hice estanques de aguas, para regar de ellos el bosque donde crecían los árboles. 7Compré siervos y siervas, y tuve siervos nacidos en casa; también tuve posesión grande de vacas y de ovejas, más que todos los que fueron antes de mí en Jerusalén. 8Me amontoné también plata y oro, y tesoros preciados de reyes y de provincias; me hice de cantores y cantoras, de los deleites de los hijos de los hombres, y de toda clase de instrumentos de música. 9Y fui engrandecido y aumentado más que todos los que fueron antes de mí en Jerusalén; a más de esto, conservé conmigo mi sabiduría. 10No negué a mis ojos ninguna cosa que desearan, ni aparté mi corazón de placer alguno, porque mi corazón gozó de todo mi trabajo; y esta fue mi parte de toda mi faena. 11Miré yo luego todas las obras que habían hecho mis manos, y el trabajo que tomé para hacerlas; y he aquí, todo era vanidad y aflicción de espíritu, y sin provecho debajo del sol.
a) NOTA: Salomón trató de retener su sabiduría y su cordura en medio de su vida de abundancia, sabiendo que la abundancia corrompe al hombre:
Pr.30: 8Vanidad y palabra mentirosa aparta de mí; No me des pobreza ni riquezas; Mantenme del pan necesario; 9No sea que me sacie, y te niegue, y diga: ¿Quién es Jehová? O que siendo pobre, hurte, Y blasfeme el nombre de mi Dios.
b) El pobre se nutre de la esperanza de “hacerse rico y ser feliz”, pero el rico vive la frustración de ya ser rico y no haber hallado la felicidad.
5) La felicidad (el fin) no está en dejar una obra o un nombre para la posteridad:
12Después volví yo a mirar para ver la sabiduría y los desvaríos y la necedad; porque ¿qué podrá hacer el hombre que venga después del rey? Nada, sino lo que ya ha sido hecho. 13Y he visto que la sabiduría sobrepasa a la necedad, como la luz a las tinieblas.
a) La expresión “después volví yo a mirar…” muestra que, aunque Salomón ya había llegado a la conclusión que en la sabiduría humana no estaba la respuesta, su decepción por su fracaso existencial a pesar de sus riquezas, obras y logros, lo llevó otra vez a considerar los méritos de ésta.
· Después de todo, la sabiduría brilla ante la necedad (v.13), y es precisamente “brillar” lo que desea el corazón del hombre.
b) Salomón pensó por un momento que su sabiduría le permitiría dejar un legado eterno, de modo que el siguiente rey no podría superar su obra.
c) Finalmente, su conclusión es otra vez frustrante:
14El sabio tiene sus ojos en su cabeza, mas el necio anda en tinieblas; pero también entendí yo que un mismo suceso acontecerá al uno como al otro. 15Entonces dije yo en mi corazón: Como sucederá al necio, me sucederá también a mí. ¿Para qué, pues, he trabajado hasta ahora por hacerme más sabio? Y dije en mi corazón, que también esto era vanidad. 16Porque ni del sabio ni del necio habrá memoria para siempre; pues en los días venideros ya todo será olvidado, y también morirá el sabio como el necio.
· La sabiduría no librará al sabio de la muerte ni del olvido.
6) El fin inevitable:
17Aborrecí, por tanto, la vida, porque la obra que se hace debajo del sol me era fastidiosa; por cuanto todo es vanidad y aflicción de espíritu. 18Asimismo aborrecí todo mi trabajo que había hecho debajo del sol, el cual tendré que dejar a otro que vendrá después de mí. 19Y ¿quién sabe si será sabio o necio el que se enseñoreará de todo mi trabajo en que yo me afané y en que ocupé debajo del sol mi sabiduría? Esto también es vanidad. 20Volvió, por tanto, a desesperanzarse mi corazón acerca de todo el trabajo en que me afané, y en que había ocupado debajo del sol mi sabiduría. 21¡Que el hombre trabaje con sabiduría, y con ciencia y con rectitud, y que haya de dar su hacienda a hombre que nunca trabajó en ello! También es esto vanidad y mal grande. 22Porque ¿qué tiene el hombre de todo su trabajo, y de la fatiga de su corazón, con que se afana debajo del sol? 23Porque todos sus días no son sino dolores, y sus trabajos molestias; aun de noche su corazón no reposa. Esto también es vanidad.
· Esto explica la alta incidencia de suicidio entre los ricos, y los billones de dólares al año que gastan en siquiatras y medicamentos para la depresión, la ansiedad y el insomnio.
7) La sabia conclusión:
24No hay cosa mejor para el hombre sino que coma y beba, y que su alma se alegre en su trabajo. También he visto que esto es de la mano de Dios. 25Porque ¿quién comerá, y quién se cuidará, mejor que yo? 26Porque al hombre que le agrada, Dios le da sabiduría, ciencia y gozo; mas al pecador da el trabajo de recoger y amontonar, para darlo al que agrada a Dios. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.
a) Esta conclusión alentadora aparece en el primer pasaje dentro del contexto donde aparece el nombre de Dios, como parte de las reflexiones de Salomón.
b) Dos verdades claves reveladas:
1. Disfrutar de los bienes que Dios nos concede es también un don divino, y parte de su perfecta voluntad.
2. La “obra” de mayor rendimiento para el hombre es agradar a Dios.
· El hombre que agrada a Dios recibe sabiduría, conocimiento y gozo (satisfacción personal).
· El pecador está sujeto a vanidad y aflicción de espíritu, y sin saberlo trabaja para el justo.
8) El mismo principio en palabras de Jesús:
Mt.6: 25Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? 26Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? 27Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo? 28Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; 29pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos. 30Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe? 31No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos? 32Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. 33Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. 34Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.
· No se trata de abandonar responsabilidades importantes, sino de no abandonar las necesarias.
C) UNA REFLEXIÓN SALOMÓNICA FINAL
Ec.4: 6Más vale un puño lleno con descanso, que ambos puños llenos con trabajo y aflicción de espíritu.
MIS AMADOS, LOS BENDIGO Y DESEO DE TODO CORAZON QUE LA PRESENCIA DE NUESTRO PADRE CELESTIAL ALUMBRE SUS PASOS EN ESTE NUEVO AÑO 2009, Y QUE TODO SU PODER Y SABIDURIA LOS RESPALDE EN TODO LO QUE HACEN. BARUCH HASHEM!!!, QUE NUESTRO AÑO NUEVO NOS LLEVE "DE GLORIA EN GLORIA Y DE VICTORIA EN VICTORIA ..."
P. Jorge A. Arango. Ministerio Apostolico Levantando Descendencia Para Dios. CENTRO DE TRANSFORMACION INTEGRAL, MEDELLÍN, COLOMBIA.
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